Cataluña debe devolver 24.000 millones al Estado mientras negocia con Sánchez. El Govern de ERC y Junts está obligado a afrontar vencimientos de deuda por más 10.000 millones al año. Hacienda, que necesita los votos de los independentistas, ha condonado 1.000 millones a la Generalitat.
La Generalitat de Cataluña está obligada a devolver al Estado más de 24.000 millones de euros en lo que resta de legislatura nacional. Es decir, en lo que dure la ‘Operación Reencuentro 2.0‘ que ya ha iniciado Pedro Sánchez con Pere Aragonès, el Govern tendrá que afrontar vencimientos de deuda a largo plazo a razón de casi 10.000 millones al año. La realidad financiera del Gobierno catalán es esta. Pero la vía política discurre por otros derroteros y, de forma paralela, Moncloa y el Ministerio de Hacienda ya están tentando a ERC para poder aprobar los segundos Presupuestos de la coalición. Un tanteo al que acompañan planteamientos económicos de calado, como la condonación de 1.024 millones de euros o la devolución 458 millones correspondientes al llamado Suministro Inmediato de Información del IVA de 2017, ambas medidas aprobadas por Hacienda esta misma semana.
La deuda acumulada por Cataluña con el Estado corresponde a los mecanismos de liquidez (Fondo de Liquidez Autonómica, Mecanismo de financiación para el pago a proveedores y Fondo Social, principalmente) que el Gobierno de Mariano Rajoy puso a disposición de las comunidades autónomas durante los momentos más duros de la anterior crisis económica. Fue una ayuda financiera vital para la Generalitat, presidida entonces por Artur Mas, ya que sin estas ayudas, como repitió por activa y por pasiva el anterior ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, la comunidad catalana estaría quebrada y no podría haber hecho frente a sus obligaciones.
Ahora esa deuda tiene que ir devolviéndose a plazos. Se da la circunstancia, precisamente, que los momentos donde se cumula una mayor amortización de la misma se corresponden con el diálogo bilateral que se ha iniciado entre el Gobierno central y autonómico. Sánchez y Aragonès ya se vieron en Moncloa y, aunque el president de la Generalitat no acuda a la Conferencia de Presidentes de este viernes en Salamanca, está convocada para el próximo lunes una primera cita de la comisión bilateral. Ahí se pondrán las bases para retomar la Mesa de negociación tras de la Diada, una tabla que, como apuntan fuentes de uno y otro lado, tendrá un claro componente económico.
Según el último informe financiero de la Dirección General de Política Financiera, Seguros y Tesoro que elabora la Consejería de Economía y Hacienda, con Jaume Giró al frente, el Govern tiene que devolver 4.372 millones al Estado en lo que queda de año. Sólo este mes de julio ha tenido que retornar 1.958 millones. 2022 y 2023 serán los años más ‘duros’ para Cataluña: la deuda asciende a 9.852 millones y a 9.726 millones, respectivamente. A partir de 2024 las devoluciones se van reduciendo: 6.989 millones ese año, 7.330 millones en 2025, 6.511 millones en 2026… En total, entre este 2021 y el año 2033, Cataluña tiene que retornar a las arcas centrales más de 64.000 millones.
La deuda de la Generalitat de Cataluña es aún mayor si se incluyen en este montante los préstamos bancarios y emisiones de deuda, tanto a corto como a largo plazo, que también tiene que amortizar obligatoriamente el Govern. En este caso, la ‘cuenta’ asciende a más de 72.000 millones hasta el año 2041, según el último informe trimestral del Departamento de Economía y Hacienda. Existe, eso sí, una pequeña diferencia entre la cifra total de deuda de Cataluña que reconoce la Generalitat (70.595 millones a fecha de 30 de septiembre de 2020) y la que admite el Banco de España (78.292 millones). Esto se debe, según se explica en el mismo informe del Govern, a la “diferente metodología en la recopilación de datos”.
Entre 2021 y 2033, Cataluña tiene que retornar a las arcas centrales más de 64.000 millones
Estas cifras de deuda coinciden con una negociación que se ha puesto en marcha tras la composición del nuevo Govern y los indultos. Se produce, además, en plena polémica por los avales del ICF, Instituto Catalán de Finanzas, a los líderes del procés. Y también con los anuncios realizados por la ministra de Hacienda en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) de este miércoles, el primero que contó con la presencia del conseller catalán tras cinco años. Cataluña se beneficiará de los citados 1.024 millones por la liquidación negativa de las comunidades autónomas sobre las transferencias recibidas en 2020 y de 458 millones por la no reclamación del IVA de 2017. El propio consejero Giró salió especialmente satisfecho de esta reunión presidida por Montero y así lo explicó en declaraciones posteriores.
Hay que recordar que un ‘think tank’ de ERC ya reconocía hace unos años que la Generalitat podría asumir el pago de la deuda con el Estado si fuera un país independiente. El estudio fue elaborado por la Fundación Josep Irla y concluía que, en caso de secesión, Cataluña podría abonar como máximo 85.000 millones de euros de los pasivos -deuda- del Estado español. El informe, titulado ‘Reparto de activos y pasivos entre Catalunya y el Estado español‘, fue elaborado por los economistas Jordi Angusto y Gemma Pons y el ingeniero Marcel Coderch.
Cataluña, no obstante, no es la única autonomía beneficiada de la decisión de Hacienda de esta misma semana. La ministra Montero anunció una lluvia de millones a las diferentes autonomías con un reparto de los 13.486 millones de euros adicionales que se incluyeron en los Presupuestos Generales del Estado para 2021. El dinero se distribuirá por el criterio de población ajustada, la opción que eligieron la mayoría de comunidades autónomas. Además, dio a conocer el importe de las entregas a cuenta que recibirán en 2022 las comunidades del sistema de financiación autonómica, una cifra que alcanza los 112.213 millones de euros, un 6,3% más que el año anterior. Se trata de la mayor cifra de la serie histórica.