El 73% tiene claro que los jóvenes van a vivir peor que sus padres y abuelos tras la pandemia de Covid en España, según el CIS.
Más de la mitad de los españoles ve a los jóvenes como “ciudadanos de segunda” respecto a las personas mayores con los mismos derechos y oportunidades económicas y laborables y con peores oportunidades tras la Covid. Además, el 73% considera que la juventud de España va a vivir peor que sus padres y abuelos.
El CIS ha hecho público este jueves el estudio Infancia y juventud ante la pandemia de la Covid-19, en el que se observa que el 54,2% de los encuestados cree que los jóvenes son “ciudadanos de segunda categoría” porque tienen una”unas posiciones y oportunidades peores” que las personas mayores. Sólo el 32% les equipara a los adultos y les considera “ciudadanos de primera categoría”.
Si antes de la pandemia casi la mitad de la población pensaba que las nuevas generaciones iban a vivir peor que sus padres, ese porcentaje se eleva ahora al 73,2% mientras que se desploma el dato de quienes vaticinan que su futuro mejorará, al caer del 28,9% previo al coronavirus a un 8,5%.
De aquellos que ven a los jóvenes como “ciudadanos de segunda”, el 47,7% opina que es “por la falta de oportunidades laborales, empleos estables y de calidad” mientras que un 15,9% lo achaca a que “no se les brindan oportunidades”.
El 7,2% lo achaca a que a los jóvenes se les trata como inexpertos y el 4,7% a sus falta de poder adquisitivo. Sólo el 1,6% hace referencia a los problemas para acceder a una primera vivienda.
En esta línea, el 82% de los encuestados destacan que las administraciones públicas “no hacen lo suficiente en estos momentos por apoyar y ayudar a los jóvenes”. De ellos la mitad cree que habría que “ofrecer más ayudas para encontrar empleo” y un 47% “mejorar las condiciones laborales y la situación de los becarios”. El 85% afirma que la pandemia está dando lugar a un aumento de las desigualdades sociales.
Por último, el CIS también pregunta qué hacer frente a la pobreza. 7 de cada 10 españoles es partidario de que “las personas acomodadas pagaran más impuestos para que el Gobierno tuviera más medios para actuar de forma urgente contra la pobreza”.
Para luchar contra esa situación de vulnerabilidad en la que la pandemia ha situado a muchas familias, de forma unánime los encuestados proponen “fomentar la empleabilidad de sus padres” -el 96,9%-, “dar apoyo educativo adicional a los niños que lo necesiten” -el 95,5%- o más becas de comedor para familias con pocos recursos económicos -94,1 %-. Para más del 80% la mejor política social es el empleo.
El elevado precio de la vivienda es para el 89,5% muy o bastante importante para explicar la pobreza, cuya lucha cree el 45% que debería liderarla el Estado.
Este estudio se ha hecho con 2.064 entrevistas entre el 25 de junio y el 5 de julio.
