La verificación de fotografías de Apple en el propio iPhone ha despertado la preocupación de quienes creen que este sistema de investigación de los dispositivos de sus usuarios podría ser explotados por los gobiernos.
Apple lanzará un sistema para verificar fotos en busca de imágenes de pornografía infantil país por país, según las leyes locales, según explicó ayer la compañía. Un día antes, Apple dijo que implementaría un sistema que filtra las fotos para que las imágenes se carguen desde los iPhones en EEUU a su almacenamiento de iCloud, informa Reuters.
Los grupos que luchan contra la pornografía infantil elogiaron a Apple cuando se unió a Facebook, Microsoft y Google para tomar estas medidas. Pero la verificación de fotografías en el propio iPhone ha despertado la preocupación de quienes creen que este sistema de investigación de los dispositivos de sus usuarios podría ser explotados por los gobiernos. Muchas otras empresas de tecnología comprueban las fotos después de cargarlas en los servidores.
En una conferencia de prensa ayer, Apple dijo que haría planes para expandir el servicio según las leyes de cada país donde opera. La compañía aseguró que adoptará medidas, como los “chequeos de seguridad” que se pasan del iPhone a los servidores de Apple que no contienen datos útiles, para proteger a la compañía de la presión de los gobiernos para identificar material que no sea imágenes de abuso infantil.
Apple tiene un proceso de revisión humana que actúa como un respaldo contra el abuso de los gobiernos, agregó. La empresa no pasará informes de su sistema de verificación de fotografías a las autoridades policiales si la revisión no encuentra abuso infantil.
Los reguladores exigen cada vez más que las empresas de tecnología luchen contra el contenido ilegal. Durante los últimos años, tanto las fuerzas del orden como las administraciones han utilizado la excusa del material de abuso infantil para desacreditar el cifrado fuerte, igual que anteriormente habían utilizado la necesidad de frenar el terrorismo.
Algunos estados, como Gran Bretaña, han aprobado leyes que podrían obligar a las empresas de tecnología a actuar en secreto contra sus usuarios.
Para muchos expertos en seguridad, la decisión de Apple puede ser un gran error al mostrar su voluntad de acceder a los teléfonos de los clientes.
“Es posible que haya desviado la atención de los reguladores estadounidenses hacia este tema, pero atraerá a los reguladores a nivel internacional a hacer lo mismo con el contenido terrorista y extremista”, aseguró Riana Pfefferkorn, investigadora del Observatorio de Internet de Stanford.
WhatsApp, el servicio de mensajería totalmente encriptada más grande del mundo, también está bajo la presión de los gobiernos de muchos países que quieren saber lo que dice la gente, y teme que aumente la coacción. El jefe de WhatsApp, Will Cathcart, tuiteó sentirse “preocupado”. “Es la forma de dar un paso atrás en la privacidad de la gente”.
“Hemos tenido ordenadores personales durante décadas y nunca ha habido un mandato para escanear el contenido privado de todas las computadoras de escritorio, portátiles o teléfonos en todo el mundo en busca de contenido ilegal”, escribió. “No es así como funciona la tecnología construida en países libres”.