El director del instituto independiente de investigación en salud IGES de Berlín, Dr. Bertram Häussler, señala que es probable que el 80% de las muertes por Covid notificadas en Alemania por el Instituto Robert Koch (RKI, por la sigla en alemán), sean atribuibles a otras causas.
“Hemos determinado que en un buen 80% de las muertes oficiales por Covid notificadas desde principios de julio, la infección subyacente se remonta a más de cinco semanas y, por tanto, hay que suponer que [el virus] Covid no fue la verdadera causa de la muerte”, dijo el Dr. Häussler en una entrevista según el medio alemán 24 vita del 31 de agosto.
El equipo de médicos investigadores que dirige el Dr. Häussler se basa en los estudios realizados desde agosto de 2020, con el objetivo de monitorear la pandemia.
El Dr. Häusslery postula que a pesar del aumento de las cifras de infección, no habrá una “mortalidad masiva” en el futuro.
En Alemania, unos 3,8 millones de personas sobrevivieron al Covid o virus PCCh (Partido Comunista de China) y los cálculos matemáticos señalan que de ellas unas 100 morirían cada día por causas habituales de muerte.
“Ahora sucede que esos casos se asignan a una infección de Covid, según los reportes del departamento de salud desde hace meses”, explica Häussler.
Y agrega: “Podría tratarse simplemente de una persona mayor que se infectó, pero que ahora ha muerto de insuficiencia cardíaca”.
El equipo del Dr. Häussler utiliza y clasifica los datos suministrados diariamente por el RKI, que a su vez los obtiene de las 379 oficinas de salud pública. Esto les permite a los investigadores asignar una fecha de infección a cada muerte de Covid.
Para el Dr. Häussler las estadísticas habituales de mortalidad de otras fuentes están cada vez más distorsionadas.
Por eso afirma: “Se han reportado más muertes de las que realmente han sido causadas por Covid”.
Adicionalmente, el Dr. Häussler señala que el RKI sabe de la inexactitud de sus datos, y no hace nada por corregir esa situación.
“Pero quieren asegurarse de que no falte ninguna muerte de Covid en las estadísticas. Ante la masificación de este tipo de informes, las estadísticas de mortalidad están cada vez más distorsionadas”.
Por su parte, el usuario de Twitter, Kristof Jahn (@kfjJahn), hizo notar que la OMS también cambió los criterios establecidos, y a partir de allí las personas que hubieran fallecido por otras causas se reportaban como víctimas del Covid.
“El año pasado, al comienzo del pánico del [virus] Corona, la OMS también cambió las reglas para emitir certificados de defunción, que fueron adoptadas en Alemania”, escribió @kfjJahn.
Y agregó: “Por ejemplo, a cualquier persona que tuviera una enfermedad terminal de cáncer y tuviera Covid, en el momento de la muerte se registraba el Covid como causa de su fallecimiento”.
Estos manejos irregulares de las estadísticas aumentan el escepticismo con respecto a la obligación de vacunarse, que es una de las consecuencias causadas por el Covid que más se destacan actualmente.
Paralelamente, el alto porcentaje de personas vacunadas que mueren por el Covid hace que los no vacunados duden aún más, y confíen aún más en su propio sistema inmunitario natural.
Recientemente, se informó que dos tercios de las personas que murieron con la variante Delta en el Reino Unido, habían sido inoculadas previamente con al menos una dosis de la vacuna COVID-19, según el Public Health England (Salud Pública de Reino Unido) con fecha 6 de agosto.
El Reino Unido no es el único país que ha experimentado un aumento de infecciones y muertes entre quienes se han inyectado la vacuna anticovid, ya que Israel informó un patrón similar, según Life Site News.