Cuando acabamos de cruzar el ecuador del año 2021 el Instituto Nacional de Estadística (INE) puede dar una pincelada del impacto real que tuvo ese aumento de muerte en la población española.

 En su cuenta de twitter el jefe de prensa del INE también ha adelantado que en 2020 España tuvo la diferencia más negativa entre nacimientos y defunciones desde que se tienen datos en el año 1941.

El saldo vegetativo, es decir la diferencia entre nacimientos y defunciones fue negativo en 2020, explica. Murieron 153.167 personas más de las que nacieron.

En su estadística sobre el movimiento natural de población dado a conocer este jueves, el INE no especifica a qué motivos se debió el exceso de fallecimientos detectado el año pasado, pero los datos del Ministerio de Sanidad ya constataron en enero que hasta el 31 de diciembre de 2020 habían muerto 51.078 españoles por covid-19.

Este aumento de la mortalidad en España ha hecho también que la esperanza de vida disminuya en 1,24 años, al situarse en los 82,34 años, y que el crecimiento vegetativo, esto es, la diferencia entre nacimientos y defunciones, sea negativo en 153.167 personas, frente a las 57.146 de 2019.

El número de defunciones aumentó todos los meses de 2020, salvo en enero, febrero y junio. Los mayores incrementos se dieron en marzo y en abril.

En cuanto a lo que llevamos de año 2021, en las 22 primeras semanas han fallecido en España 203.868 personas, lo que supone 31.443 menos que en el mismo periodo en el año anterior.